Casual el árido corazón del dolor
en mitad de la soledad del gentío,
se retiró a una parcela del alma,
llevándose sus sueños consigo.
En un intento de valentía
rescato la semilla de ilusión,
sembrándola con cuidados,
para aquellos a quienes conocer deseaba.
Con amor y cuidados
era mucho el sacrificio que se exigía
pero vio poco a poco,
que el sueño realidad se hacía.
Arropado por intelectuales,
artistas teatrales,
en un lugar de encuentro,
rescatado de un erial de la vida.
Puso al alcance de todos,
la cultura y la poesía.
Extracto de La dualidad del ángel